EDITORIAL
Los recuerdos pueden ser malos o buenos. Feos o bonitos. Pero, son recuerdos.
Al fin y al cabo cualquiera sean, los recuerdos nos ayudan a comprender mejor cada circunstancia.
Hoy, por ejemplo el recuerdo de lo ocurrido hace nueve años puso a vibrar a Trujillo todo.
Esos misterios existencialistas que invitan a interesarnos en la comprensión de los hechos, nos hace celebrar el patriótico acontecimiento del regreso triunfal del Comandante-Presidente.
Es verdad que hasta escuchamos el aplauso del General Bolívar, pero también en medio de la algarabía brotaban lágrimas provocadas por el recuerdo con olor a sangre que cristalizaban las imágenes de los cuerpos inertes de quienes han caído en esta lucha popular desde aquel digno Caracazo de 1989.
Hoy, vivimos en la Plaza de Bolívar, en el Trujillo heroico desde la profundidad del alma los recuerdos de aquel hermoso y vibrante acto de solidaridad colectiva que hizo que los cobardes golpistas trajeran de vuelta a nuestro máximo líder Chávez.
Hoy, miércoles 13, compartimos en mayoría la pasión revolucionaria.
Unidos en el amor, el respeto y la solidaridad, juramos seguir con nuestro Comandante Presidente Hugo Chávez.
Hoy volvimos jurar lealtad a Bolívar, a Dionisia Santos Moreno, a Chávez y Hugo Cabezas y Angie Quintana.
Hoy, juramos no dejar volver a los pitiyanquis traidores... Si va!
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